En esta clase magistral se pondrá el foco en la comprensión de los principales fundamentos que generan la "presencia" del actor, cómo en una situación de representación organizada, la presencia física y mental del  actor se modela según principios diferentes de aquellos de la vida cotidiana entrenando así el estar extracotiadiano, su tono particular  y característico, afinando el instrumento en ese registro. La utilización extra cotidiana del cuerpo/mente es aquello que se llama “técnica". El análisis transcultural de la diversas técnicas de formación del actor-bailarín ha mostrado que en tradiciones muy diferentes se encuentran principios "que retornan". Los "principios que retornan" tienen que ver con el particular uso del peso, el equilibrio, la columna vertebral, los ojos, el centro, el imaginario, etc… Esto produce una calidad y cualidad extra cotidiana de energía que vuelve al cuerpo escénicamente decidido, vivo  y  potente. Desarrollando así la capacidad para atraer sobre sí la atención del espectador y conservarla consigo mucho tiempo antes de transmitir cualquier mensaje. El taller está orientado a descubrir y desarrollar mediante un entrenamiento físico basado en los estudios de la antropología teatral, una dramaturgia personal en cada actor, que le permita abordar y crear en escena desde el lugar más orgánico y auténtico de sí mismo, ampliando a la vez su autopercepción, amplificando, expandiendo las fronteras del campo extracotidiano y escénico en el que podemos ser. Concibiendo a la obra toda, como una partitura que cuanto más rica y compleja sea, más inmersos en ella estaremos como artistas y como espectadores. Es indispensable el entrenamiento corporal para el desarrollo integral del actor, este habilita al trabajo de la producción de estados emocionales y materiales escénicos contundentes  aplicables a cualquier estética o poética. Este entrenamiento pretende darle al actor la fuerza y energía necesaria para resistir al máximo su interpretación en escena utilizando y dosificando la energía, en el esfuerzo sostenido por no perder al espectador y su atención sobre lo que ocurre en escena. 

Sobre Raquel Ameri

Raquel nació en 1978, y se dedicó a la danza y el teatro desde muy temprana edad. Se formó con maestros como Laura Yusem, Guillermo Angelelli, Cristina Marti, Ricardo Bartis, Ana Frenkel, Mauricio Kartun, entre otres. También realizó estudio en técnicas vocales y canto con Guillermo Angeleli y Roxana Cane.

Como actriz realizó diversas obras, entre ellas varias piezas de Mariela Asensio, como “Mujeres en el Baño”, “Lisboa: el viaje etílico”, “Malditos todos mi ex” y “Mujeres en el Aire”. Con “Millones de Segundos” de Diego Casado Rubio fue premiada en 2018 con el Premio ACE a la mejor actriz de teatro alternativo, y fue ganadora del Premio Trinidad Guevara a Revelación Femenina, Mejor actriz Premios Teatro del Mundo y destacada por la escuela de espectadores de Jorge Dubatti.